Nuestro querido Papa amigo Su Santidad Benedicto XVI en la Jornada Mundial de La Juventud 2011, JMJ 2011 celebrada en Madrid; España.
La renuncia de Su Santidad el Papa Benedicto XVI a su Ministerio Petrino, ha conmocionado al mundo, y como consecuencia de ello se están realizando todo tipo de predicciones y especulaciones en lo referente al futuro de La Iglesia católica, que están invadiendo los correos en internet, programas de televisión, prensa, etc.
Primero hacemos la reflexión de que el Papa es totálmente sincero, es el dignísimo representante de Jesucristo en la tierra elegido por el Espíritu Santo; y ha dicho expresamente que renuncia a su Pontificado con plena libertad y después de haberlo meditado mucho y orado ante el Espíritu Santo.
San Juan escribió un bello himno a la providencia de Dios, Juan 1,3 del que resaltamos uno de sus párrafos:
"El Señor deshace los planes de las naciones, frustra los proyectos de los pueblos; pero el plan del Señor subsiste por siempre; los proyectos de su corazón de edad en edad".
.Se habla de las profecias de Nostradamus, que son falsas de toda falsedad, y ya están hace tiempo desvirtuadas por los estudiosos.
.-Se habla de las Profecias de San Malaquias, Arzobispo católico que nació en 1.094 y falleció en 1148, estas profecias fueron escritas posteriormente a su muerte por un Monje Benedictino belga llamado Arnoldo Wion para el Rey español Felipe II, en ellas aparece "El Arbol de La Vida"
Cuadros de La Catedral de Segovia, España; con e Bautismo de Señor por San Juan El Bautista (el último de los profetas según San Lucas); y el Arbol de La Vida.
Se hace referencia a los antipapas y a un personaje Pedro romano, y una predicción sobre Irlanda (que continua siendo católica) que se aplica a la entrada del anglicanismo en Inglaterra, Europa, el cisma fue en 1536. Estas profecias no escritas por San Malaquias están editadas en 1.595; por ello una de sus profecias ya no era profética sino realidad, y desvirtua la importancia que se le quiere dar.
Pero hay que hacer a esto serias puntualizaciones, el religioso Bernardo de Claraval que fue coetaeo y amigo íntimo de San Malaquias, no menciona en sus escritos nada de ello; no le parecería tan trascendente.
San Bernardo en la Catedral Castrense de Madrid, España.
San Bernardo, gran erudito y estudioso que escribió la "Vida de San Malaquias", no menciona para nada las profecías sobre Irlanda y las listas de los futuros Papas.
En la época actual, y en tiempo relativamente cercano; se están realizando muchas revelaciones privadas, que además inundan internet en algunos casos con profecias. Dios escoge las almas a quienes quiere revelar su voluntad, y cada persona tiene libertad para creerlas o no.
Pero sepamos discernir.
Porque Dios es quien dirige la Historia del mundo, y solo Él lo sabe y conoce todo; el conocimiento humano es pobre y limitado y está sujeto a la providencia Divina.
Como me dijo muy acertadamente una compañera en la fe "Dios sabe más".
Y si nos ponemos a estudiar la Biblia, tenemos muchas citas que dicen todo lo contrario de lo que se está escuchando y enviando por los medios de comunicación, escritas por San Mateo, San Juan, San Marcos, Carta de San Pablo a los Efesios:
"Los profetas eran hasta Juan el Bautista" (San Lucas 16: 16)"Se levantarán muchos falsos profetas, y a muchos engañarán" (San Mateo 24, 11)El deber de todo católico es orar por el Papa, que se encuentra revestido de la gracia de Espíritu Santo, para que tenga fortaleza y sabiduría; que por supuesto no está sujeto en su voluntad a los vaivenes de mayordomos infieles, insultos en twitter, y opiniones de los demás, etc; porque está muy por encima de ello. Y no hay que buscar nada más que en sus propias palabras escuchadas personalmente en la JMJ 2011, oren por mi como yo oraré por vosotros queridos jóvenes, cuando nos pidió que lleváramos con nosotros a todas partes la Cruz que nos bendijo.
Su Santidad el Papa Benedicto XVI en el inicio de su Pontificado, con el evidente vigor que ahora le falta
Su declive físico y falta de vigor, es evidente, y en pocos meses ha sido grande; se retira donde acertadamente debe estar, en un Monasterio de Clausura dentro del Vaticano, orando por su Iglesia. Porque como Papa prudente y sabio, resulta acertado no volver a la vida pública, y decide quedarse orando dentro de las dependencias de Vaticano, porque recordemos es sacerdote eterno y ha sido roca firme de La Iglesia.
Como opinión personal, no dudo en absoluto de aquellas bellas palabras, aunque recogidas en los evangelios apócrifos de San Pedro que le dijo al Señor cuando salia de Roma y vió a Jesucristo cargando su Cruz,
¿Quo Vadis Domine?, ¿adonde vas Señor?.
Si Su Santidad el Papa Benedicto XVI revestido de Espíritu Santo por su Ministerio Petrino, tuviera que dar su vida por Jesús, la daría sin dudarlo y hasta el último aliento, como la dio San Pedro, el primero de los Papas que volvió a Roma en plena persecución de los cristianos, y murió en la Cruz por mandato de Nerón, pero boca abajo porque no se consideraba digno de morir como Jesús; y no se marcharía de la silla de San Pedro en Roma.
La Santa Cruz del Valle de los Caidos en San Lorenzo de Escorial, Madrid, España; la de mayor dimensión del mundo, vista desde el Via Crucis.
No seamos más papistas que el Papa, y oremos como es nuestra obligación y se nos pide, para que los Cardenales iluminados por el Espíritu Santo, elijan al nuevo Papa, haciendo la voluntad de Dios en su designio.
Y como nos dijo Su Santidad Juan Pablo II, que sobrevivió a un atentado contra su vida "no tengais miedo".
Está escrito que los poderes de las tinieblas nunca prevalecerán sobre La Iglesia fundada por Jesucristo.
Fotografías del Convento de Las Carmelitas Descalzas de La Granja de San Ildefonso, Segovia, España.
Monseñor Munilla dedica unas bellas palabras a Benedicto XVI y nos pide la oración a todos los creyentes para nuestra querida Iglesia católica: Publicamos en el siguiente comentario, las recientes y magistrales palabras de Monseñor Munilla, Obispo de San Sebastián, España, representante actual de los Ápostoles en la tierra, de agradecimiento a Su Santidad Benedicto XVI por su Pontificado, y donde nos pide que oremos por nuestro querido Papa Benedicto XVI, y para que el Espíritu Santo ilumine a Los Cardenales en la elección del nuevo Papa, ¡gracias Monseñor Munilla!:
Hay algunos acontecimientos que requieren de una cierta distancia para poder ser valorados, como es el caso de la renuncia de Benedicto XVI. Si bien es cierto que el Papa nos ha sorprendido tras la noticia inesperada, cuando reflexionamos con detenimiento su decisión, nos percatamos de que Joseph Ratzinger no ha hecho sino continuar con la que ha sido su más clara opción de vida: la ‘renuncia’ de sí mismo por amor a Cristo y a su Iglesia. En efecto, renunció desde el primer momento a tener una vida tranquila y cómoda, renunció a formar una familia, renunció a una formación mediocre, renunció a su amada patria, renunció a la vanidad, renunció a ejercer la defensa propia cuando era atacado y traicionado… Y ahora, en este momento de su vida en el que se ha sentido débil para poder llevar adelante su ministerio, ha renunciado al liderazgo en el seno de la Iglesia. La decisión de Benedicto XVI solo se explica por su viva conciencia de no ser dueño de la vocación que ha recibido de Dios.
Ante todo y sobre todo, quiero expresar el más profundo agradecimiento de nuestra Diócesis de San Sebastián a Benedicto XVI. Le debemos, no digo mucho, sino ¡muchísimo! Su denuncia profética del relativismo, acompañada por la perspectiva de fe con la que con la que nos ha enseñado a afrontar la existencia, han sido y siguen siendo el mejor antídoto para nuestra particular crisis local. No estaría de más que reconociésemos humildemente que, con frecuencia, los prejuicios nos han impedido acoger adecuadamente la riqueza de este pontificado. ¡A veces, es la propia enfermedad la que indispone para recibir al médico! Pero afortunadamente, las resistencias del primer momento han ido cediendo ante la evidencia de un hombre de fe, bueno, humilde, libre y sabio; y posiblemente en el momento actual tengamos mejor disposición para recibir el legado que nos deja Benedicto XVI. La magistral homilía del Papa en su última Misa pública, el Miércoles de Ceniza, alertando sobre los golpes contra la unidad de la Iglesia y las divisiones internas, es el testamento más elocuente de un pontificado que ha luchado en todo momento por la “caridad en la verdad”.
Es momento de aprender de nuestros errores para disponernos adecuadamente ante el nombramiento de su sucesor. En efecto, la Iglesia va a poner en marcha el proceso electivo de un nuevo Papa, y lo hace invocando con fe y confianza al Espíritu Santo, para que ilumine al Colegio Cardenalicio. Como responsable de nuestra Iglesia diocesana, he pedido a nuestros sacerdotes que durante los días del cónclave celebren la liturgia de la Misa ‘Pro eligendo Pontífice’, y que cuando se produzca la ‘fumata blanca’, resuenen las campanas de nuestras iglesias. Si el proceso sigue los cauces previsibles, el segundo domingo de Pascua, fiesta de la Divina Misericordia —que este año será el 7 de abril— celebraré una Eucaristía de acción de gracias en nuestra Catedral del Buen Pastor, al mismo tiempo que lo hacen los sacerdotes en todas las parroquias.
Desde ahora nos adherimos plenamente a quien vaya a ser elegido como próximo Papa, aún sin saber su nombre, su procedencia u otras circunstancias. Os pido que ya recéis por él, que nos unamos todos en la oración por el futuro Romano Pontífice: Se trata de una actitud de fe, sabiendo que el Espíritu de Dios nos conduce a través de las mediaciones humanas, e incluso por encima de ellas. En medio de tantas quinielas y de comentarios ‘politizantes’ ajenos a la vida de la Iglesia, nuestra confianza en el Espíritu Santo nos preserva de los peligros a los que alude San Pablo ya en el siglo primero de la Iglesia: “Y os digo esto porque cada cual anda diciendo: «yo soy de Pablo, yo soy de Apolo, yo soy de Cefas, yo soy de Cristo». ¿Acaso está divido Cristo?..” (Cfr. 1 Co 1, 12-13). Me permito insistir: la adhesión de los católicos al Papa es previa a haberle conocido, porque es una adhesión en la fe, en la esperanza y en la caridad.
Como todavía estamos a tiempo de recibir de Benedicto XVI su gran legado, quisiera concluir con una selección de diez ‘perlas’, diez reflexiones luminosas ofrecidas por el todavía Papa, en el ejercicio de lo que muchos han calificado como una “pastoral de la inteligencia”:
- “Donde Dios no ocupa el primer lugar, corre peligro la dignidad del hombre”.
- “Cuando el hombre se aparta de Dios, no es Dios quien le persigue, sino los ídolos”.
- “Una fe que nosotros mismos podemos determinar, no es en absoluto una fe”.
- “La razón no se salvará sin la fe, pero la fe sin la razón no será humana”.
- “Cuando la política promete ser redención, promete demasiado. Cuando pretende hacer la obra de Dios, pasa a ser, no divina, sino demoníaca”.
- “El laicismo se está convirtiendo en una ideología autoritaria e intolerante”.
- “No es la ciencia la que redime al hombre. El hombre es redimido por el amor”.
- “Hay quien afirma que el respeto a la libertad del individuo hace que sea erróneo buscar la verdad. Pero, ¿qué objeto tiene entonces la libertad?”.
- “Las cuentas sobre el hombre, sin Dios, no cuadran; y las cuentas del universo, sin Dios, tampoco cuadran”.
- “La cultura de Europa nació del encuentro entre Jerusalén, Atenas y Roma; del encuentro entre la fe en el Dios de Israel, la razón filosófica de los griegos y el pensamiento jurídico romano”.
http://blogs.hazteoir.org/opinion/2013/02/19/benedicto-infatigable-buscador-de-la-unidad-por-mons-munilla/
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