Sunday, December 8, 2013

Jesucristo Engendrado no creado en el vientre de La Virgen María. Inmaculada Concepción Patrona de España

Hoy celebramos en España a nuestra Patrona La Inmaculada Concepción, Dogma de fe desde 1854. También desde nuestro cariño Patrona de Europa, ya que la bandera europea según nos relata Arsene Heitz, católico francés nacido en Estrasburgo que la diseñó, está inspirada en la Corona de 12 Estrellas de La Virgen Inmaculada.
La Virgen Inmaculada es Patrona del Ejército español de Infantería.


La Virgen María Inmaculada Concepción, en su advocación como Reina de La Paz de Medjugorje, Reina y Señora de Europa como Reina y Señora de todo lo creado

Queremos tener un recuerdo muy especial por nuestra Madre, para entre todos los defensores del Derecho a La Vida conseguir que en Europa y en el mundo se respete el mayor y esencial de todos los Derechos del Ser Humano LA VIDA, sin el cual es imposible que existan el resto de los derechos 



Hemos encontrado dentro de nuestra cultura pictórica, en el Cuadro del entierro del Conde de Orgaz, impresionante y bellísima representación pintada por El Greco, un detalle que llama la atención, porque al alma que asciende al cielo se dibuja por tan insigne artista con una delicadeza especial con forma de feto o Bebé Concebido que vuelve al mismo instante de su concepción o inicio de La Vida, y con esta forma sube a la morada eterna.
Con ello El Greco nos manda un mensaje de defensa del Derecho a La Vida, indiscutido en el Arte y la belleza:



Es nuestro pequeño homenaje en el día de hoy a los Bebés Concebidos


Fragmento del Cuadro que representa el cielo con Dios Padre, Dios Hijo, y el Espíritu Santo. La Santísima Trinidad con nuestra Madre María; y en su parte inferior central un Ángel acompaña el alma del Conde de Orgaz, representada con forma de Bebé Concebido. 

María, querida Madre del cielo y de todos los hombres, en el día de hoy y de tu Inmaculada Concepción, te damos las gracias por haber dicho "SI", por haber pronunciado aquel maravilloso y confiado "FIAT", y con tu entrega sacrificada habernos traído al mundo a tu Hijo Jesucristo "Engrendado" no creado de la misma naturaleza del Padre, como repetimos en nuestra profesión de fe cuando rezamos "El Credo".
Por haber traído La Luz al mundo, tu Hijo Jesucristo, quien muriendo en La Cruz por todos nosotros, lo restauró todo.
Venciste al poder de las tinieblas, porque si una Mujer Eva, trajo el pecado a la tierra. 
Fuiste tu la Mujer con más dignidad entre las Mujeres, quien ha sido y sigue siendo instrumento imprescindible de La Redención.
No tuviste miedo al aceptar "Engendrar" al Hijo de Dios del Espíritu Santo, y por eso nos repites ¿De que tienes miedo, no estoy yo aquí contigo que soy tu Madre?.
Gracias por quedarte entre nosotros y por protegernos 


La Virgen Inmaculada Nuestra Señora de Guadalupe Patrona de los Bebés Concebidos 

Inmediatamente te pusiste en camino para ayudar a tu prima Santa, Isabel, quien a pesar de su avanzada edad había también "Concebido" a un hijo, la que llamaban estéril. 
Y de nuevo vuelves a creer, como creyeron tus padres San Joaquín y santa Ana al mismo Arcángel al haberte Concebido en su ancianidad.
Se repite y refuerza el Mensaje Divino enviado por el Arcángel San Gabriel, el primero de los Arcángeles que tuvo la dicha de contemplar como se había hecho la Voluntad de Dios, y se cumplieron Las Escrituras y el Mensaje del Apocalipsis, porque fue una Mujer la que aplastó la cabeza de la serpiente, el antiguo diablo Satanás y venció a las tinieblas. 
Y nos enviaste tu mensaje de servicio hacia los demás, porque viajaste inmediatamente para acompañar a Santa Isabel que ya estaba embarazada de seis meses, y te quedaste con ella tres meses más, hasta que dio a luz a quien sería San Juan el Bautista, primo de Nuestro Señor Jesucristo.




Porque "Nada Hay Imposible para Dios", te oramos querida Madre para que nos ayudes, nos des sabiduría y fortaleza para vencer al aborto, y restaurar la verdadera dignidad de toda mujer, que es su maternidad. Haciendo siempre la voluntad del Señor y no la nuestra.


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